Hace tiempo que los ciberataques han dejado de ser un tema desconocido. Durante años, conceptos como hacker, virus y ciberseguridad han inundado la mente de millones de personas. No obstante, más allá de las películas, series y redes sociales, es un factor en aumento y que en el mundo real representa un gran riesgo.
Desde antes de la aparición del Covid-19, la relevancia de la ciberseguridad, como antídoto de los ciberataques, era creciente y, a raíz de la emergencia sanitaria, se trata de un factor aún más importante. Veamos por qué.
Según el reporte Thales Global Data Threath 2021, el 41% de las compañías experimentaron, durante el año, al menos un ciberataque. Esta cifra es aún más escandalosa si se considera que en el 2019 el dato era de tan solo la mitad.
En solamente dos años se duplicó la inseguridad cibernética para el mundo empresarial que, además, tuvo que afrontar las dificultades de un mundo en pandemia.
En estos momentos, más que nunca, las empresas ven en el mundo digital a un aliado que puede cubrir ciertas necesidades y expectativas. Incluso aquellas compañías que ya encontraban en la web parte de o toda su actividad, redoblaron esfuerzos para mejorar su operación.
Esto se debe en gran medida a la emergencia sanitaria que si bien complicó de muchas formas al mundo empresarial, también volcó a los consumidores al Internet, algo que no pasó por alto para las organizaciones de todos los tamaños.
En este sentido, es comprensible que los ciberataques y la ciberseguridad hayan crecido en importancia paralelamente. Sin embargo, parece que en su presencia real, los ciberataques van ganando la partida a la ciberseguridad.
Sería descabellado dar con un solo culpable de que los ciberataques vayan en aumento en comparación con la ciberseguridad. Pero lo que sí podemos hacer es mostrar un panorama que puede revelar parte de la problemática. Ese panorama es la amplia gama de posibilidades que poseen los piratas cibernéticos.
Existen tres vías principales para que ocurran los ciberataques, cada uno con una incidencia elevada y que veremos a continuación.
Es una forma de estafa, en la que se busca robar la identidad de una empresa o ente público. Su finalidad es obtener información valiosa, como números de cuentas bancarias, para cometer fraude.
Aunque el phishing se puede cometer a través de mensajes de texto o llamadas telefónicas, es muy común encontrar páginas web que simulan ser alguna organización, correos electrónicos con intenciones maliciosas y ventanas web emergentes que son el gancho para el fraude.
Sin embargo, este tipo de ataques cibernéticos tienen sus puntos débiles, como la revisión periódica de las cuentas bancarias para detectar movimientos inusuales, filtros para evitar el spam y, sobre todo, evitar responder solicitudes de información personal en el plano digital, por mensajería o en llamadas telefónicas.
Se trata de un tipo de virus que realiza una especie de secuestro informático de la información de los dispositivos electrónicos. Esta acción tiene como objetivo cifrar el acceso a la información para que la víctima tenga que pagar para obtener un código de descifrado y recuperar su información.
Este tipo de ataque se puede dar por los mismos métodos que el phishing, así como por la descarga de aplicaciones fuera de las tiendas oficiales. Además, es una acción doblemente peligrosa, pues muchas veces la información retenida puede tratar de venderse a terceros.
Por otro lado, conseguir descifrar la información secuestrada virtualmente, es una labor complicada y negociar con piratas cibernéticos es un movimiento riesgoso también. Por ello, se recomienda contar con respaldos de información y la actualización de antivirus y programas.
El más común de todos los ataques cibernéticos y que tiene como objetivo dañar un dispositivo a través de un software malicioso. Este tipo de software, algunas veces, es esparcido por la web con ayuda de otras víctimas que, sin saberlo, terminan reenviando el virus a sus contactos.
Incluso en el contexto complicado en el que nos encontramos, en Compucentro sabemos que existe una forma de contrarrestar los ciberataques, tanto a nivel empresarial como en el ámbito personal.
Se trata de la mejor defensa que existe contra los piratas cibernéticos y por la cual nuestro director, Horacio Gutiérrez, fue citado por Roberto Fuentes Vivar, en su columna Diario Ejecutivo, en el medio Red Financiera MX. ¿De qué se trata? De la prevención.
“La empresa especialista en soluciones de TI, señala que la prevención es la mejor defensa para combatir este tipo de ataques”, señala Fuentes Vivar. Lee más aquí.
En Compucentro, sabemos que el objetivo de los ciberataques es detener los servicios que presta una empresa o el robo de información, por lo que la prevención, en el mundo real, juega un papel fundamental hacia el futuro, en un mundo complicado y que trata a menudo estos temas solamente en la fantasía.
