Existen muchos tipos de equipos de cómputo, con una gran variación en opciones de configuraciones, diseños, precio y aguante, haciendo difícil elegir cuál es la que mejor se adapta a las necesidades de tu empresa o corporación.

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Para comenzar: ¿para qué tipo de necesidades las necesitas? ¿Cómo las necesitas? Además de especificaciones mínimas para la tarea a realizar.

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No debe ser una tarea abrumadora; en Compucentro contamos con ingenieros certificados que pueden darte asesoría y soluciones sobre el tema, para que elijas adecuadamente los equipos que se adaptan a todos tus requerimientos de cómputo.

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Comencemos con las diferencias de equipos de cómputo empresarial y de consumo, para entender, poco a poco, las necesidades específicas de lo que necesitas en tu negocio.

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¿Empresarial o de consumo?

No importa el tamaño de tu empresa, ya sea chica o grande, es bien sabido que los equipos de cómputo de consumo no son iguales a los empresariales; por este motivo es esencial conocer las diferencias y distintas necesidades de ambos equipos de cómputo. Hay que detallar cada uno para entenderlo.

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Línea de consumo

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Estos equipos están orientados al usuario como individuo. Generalmente cuentan con estilos llamativos y coloridos, además de diferentes modelos. Están pensados para utilizarse en un periodo no mayor a cinco horas diarias.

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En pocas palabras, estos equipos están pensados para el entretenimiento y el trabajo ligero, con opción de personalización. Normalmente contienen plástico en sus materiales y tienen garantías de hasta un año en centros de servicio, pero no cuentan con extensión de la misma o servicios de fábrica.

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Generalmente son pensados para el hogar u oficinas pequeñas, que no requieren un desempeño mayor o continuo. Sus ciclos de vida son cortos, hasta seis meses, que significa el tiempo que el equipo esté en el mercado.

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Este tipo de equipos no requieren mayor seguridad o una administración constante y precisa; además sus costos son más bajos.

Línea empresarial, comercial o corporativa

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Estos equipos se obtienen por medio de canales especializados en atender empresas, negocios o gobierno. Estos equipos están diseñados para aguantar el ajetreo de las empresas. Estos deben ser duraderos, resistentes, administrables y escalables.

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Son equipos cómputo que pueden aguantar el doble que uno de consumo.

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Son robustas, con más rendimiento y listos para el trabajo continuo, gracias a sus materiales que son más duraderos y resistentes, con componentes de mayor desempeño y estabilidad. Por esto, se estima que sus ciclos de vida sean de hasta dieciocho meses.

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Estos equipos son pensados para empresas que requieren contratos al menos de tres años con arrendadoras; también cuentan con garantías en sitio de tres a cinco años. En este caso cuentan con gran variedad de extensiones de garantía y servicios de fábrica.

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Requieren de buena seguridad y administración, y se pueden hacer CTO’s (configuración a la medida). Por esto las empresas utilizan presupuestos más altos. Otro punto a considerar es que están certificados por ISV’s (Independent Software Vendors).

¿Qué tipo de equipo de cómputo debo elegir?

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Hay una extensa variedad de equipos y cada uno con diferentes características para llevar a cabo el objetivo que tienes pensado.

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Déjanos hablarte sobre las estaciones de trabajo, las laptops y computadoras de escritorio. Cada una es diferente de la otra y, claro está, con características que las hacen únicas para distintas áreas u objetivos. También se pueden incluir monitores, teclados y tablets.

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Las antes mencionadas son máquinas robustas con más rendimiento, escalables y administrables; listas para el trabajo continuo.  Te dejamos las diferentes características que ofrecen las estaciones de trabajo, las laptops y las computadoras de escritorio.